Cada vez más los créditos rápidos proliferan en Internet. Hay una variada oferta de préstamos urgentes y de toda clase de productos financieros en la red que puede ser de tu interés. Es posible comparar las ofertas del mercado crediticio para aquellas personas que tengan una necesidad puntual de liquidez o deseen realizar alguna inversión, como un nuevo negocio o para pagar ciertas facturas.
Un sector de la población más joven en edad también está en busca de ofertas para cubrir gastos, como matrículas, desplazamientos y material de estudio. Nos preguntamos si existen productos financieros que cubran las necesidades de la población de menor edad. Para este mercado, existe lo que se conoce como Préstamos y Créditos para Jóvenes.
Sí es posible encontrar entidades crediticias con una interesante oferta de créditos para jóvenes estudiantes entre 18 y 21 años de edad. Se trata de créditos rápidos y minipréstamos, algunos con un 0% de tasas de interés.
Para este producto financiero orientado a jóvenes entre 18 y 21 años, las agencias de préstamo no suelen solicitar requisitos especiales o diferentes al resto de productos de créditos rápidos. Las condiciones raramente varían. Por lo general, son las siguientes:
Con estos requerimientos, no suele haber ningún tipo de inconvenientes para los jóvenes y estudiantes entre 18 y 21 años que opten por este producto financiero. Así que es mucho más fácil de lo que creías en un principio.
Para que los jóvenes estudiantes que inician su carrera puedan afrontar los gastos de matrícula, desplazamientos, materiales de estudio, etc., existen los minicréditos estudiantiles, que les facilitan el importe del préstamos hasta un máximo de 800€. No se requieren otro tipo de condiciones distintas a las ya mencionadas.
Pueden solicitarlos todos los estudiantes mayores de 18 años que sean capaces de demostrar ingresos regulares, como un trabajo a medio tiempo, prácticas remuneradas o apoyo familiar. Estos préstamos rápidos para estudiantes son un producto financiero muy útil para solucionar los problemas puntuales de liquidez de los estudiantes.
Es importante conocer las consecuencias legales del impago de estos productos financieros. En el caso de los minicréditos para estudiantes, incumplir el plazo del pago, por parte del estudiante, podría llevarlo hasta los tribunales para obligarlo mediante la ley a saldar su deuda. Así como también, que sus datos sean incluidos en los ficheros de morosidad, como Experian o Asnef.
No se recomienda solicitar un minicrédito para pagar otro, no resulta práctico. Es más inteligente aprender a administrar el dinero que se gana por poco que éste sea, evitando gastos innecesarios y guardarlo poco a poco para cubrir la cuota de la deuda en el plazo establecido.
Es importante leer atentamente las condiciones del contrato del minicrédito para estudiantes y asesorarse previamente de cuáles son las tasas y los plazos a pagar, cada agencia de préstamo tiene las suyas. En algunas solicitan un aval, en otras no; todo depende de la cantidad solicitada y por supuesto, de que los medios económicos para devolver la deuda sean comprobables.
Aquellos jóvenes emprendedores mayores de 18 años también cuentan con la opción de solicitar créditos rápidos. Muchas entidades crediticias, además de los bancos, tienen algún producto financiero que encaje con este nuevo perfil. No suelen poner inconvenientes de edad, solo realizarán una valoración de los ingresos regulares y comprobarán sus datos bancarios para asegurar la devolución del préstamo en el plazo requerido.