¿Estás dentro de una situación complicada a nivel financiero? ¿Tienes algún imprevisto y la necesidad obtener dinero rápido? Afortunadamente vives en una época donde existen diversas opciones de préstamo para resolver de manera rápida tu contratiempo.
¿Conoces los préstamos personales baratos? No se trata de una publicidad engañosa, sino de un instrumento que ha alcanzado gran demanda en los últimos años porque, de una manera muy sencilla, podemos disponer de una solución en cuestión de 10-15 minutos a nuestro problema de índole financiera.
Vamos a considerar las diferentes opciones disponibles de préstamos personales baratos en el mercado, evaluando las tasas de intereses ofertadas y los diferentes plazos de pago, los cuales, obviamente, van a variar según las diferentes entidades.
Es un tipo de producto financiero que permite obtener una suma de dinero a cambio del compromiso de realizar una devolución a la entidad bancaria o financiera en un plazo determinado, pudiendo tener que pagar, o no, algún tipo de interés.
Este tipo de préstamo se caracteriza por tener como garantía los bienes presentes o futuros del solicitante, y no un bien específico, como es solicitado en otros tipos de productos.
Un préstamo barato lo definimos como todo aquel instrumento que carezca de algún tipo de comisión, o la misma es considerablemente baja. Se puede acceder a este tipo de préstamo en la web o yendo directamente a una entidad bancaria.
Es importante tener en cuenta que, para que un préstamo entre en este concepto, debe cumplir con ciertos requisitos, siendo el principal el aporte de garantías personales por parte del solicitante y no garantías reales, como ocurre en el caso de una hipoteca.
Pero, ¿dónde podemos conseguirlos?
Los préstamos personales baratos están generalmente asociados a un servicio de préstamos online. El uso de la web permite simplificar todo el proceso de solicitud, y hoy es también usado por la mayoría de las entidades bancarias. Este tipo de préstamos a través de la web, por lo general ofrecen comisiones bastantes bajas, o “cero comisión”.
Sin embargo, este tipo de préstamos no es exclusivo del mundo virtual, hay algunas entidades bancarias que han diseñado estrategias para comercializar entre sus clientes este tipo de apoyo financiero.
En la actualidad, existen muchas entidades financieras que han diversificado su oferta de este tipo de préstamos. Por esta razón, varía el tiempo de liquidación, pudiendo ser un pago a corto plazo, con niveles de interés bastante bajos, o incluso llegando a tener el beneficio de hasta un año de liquidación, sin ningún tipo de interés en el período.
Lo que es un hecho cierto es que, independientemente de las características y los requisitos, las tasas de interés siempre serán menores a las presentadas en los préstamos tradicionales.
Como contrapartida, a la cantidad negociada para este tipo de préstamo será ostensiblemente menor a un préstamo más “tradicional”.
Realmente no existe un préstamo barato perfecto para cada consumidor, ya que el mismo va a depender de las necesidades de financiación de cada individuo y la oferta de la entidad financiera. Sin embargo, y sin que esto sea un regla general, los mejores préstamos personales baratos son aquellos que requieren pocos trámites, tienen un tiempo de espera pequeño y además tienen una TAE menor a 8,31%, sin comisiones.
En caso de arrepentirnos de realizar la solicitud del préstamo, las leyes españolas establecen que existe un período de 14 días para desistir del préstamo, sin que exista ningún tipo de sanción por parte de la entidad.